¿Qué es el modo IA de Google y por qué afecta al SEO?
En marketing digital, hay una frase que escucho con frecuencia: “Lo que antes funcionaba, ahora ya no tanto”. Y desde que apareció el modo IA de Google, esa frase no ha dejado de resonar en mi día a día.
Llevo años trabajando el SEO y he visto pasar muchas actualizaciones, tendencias y fórmulas. Pero lo que está ocurriendo ahora con la inteligencia artificial generativa es un cambio de fondo. Personalmente, me gusta ver el tráfico informativo como el combustible de cualquier sitio web. Por supuesto que puede convertir —y debe—, pero su verdadero valor está en la visibilidad y la autoridad que genera.
Desde que Google empezó a integrar respuestas generadas por IA en su buscador, he tenido que replantearme cómo escribo, cómo estructuro los contenidos y, sobre todo, cómo entender el nuevo comportamiento del usuario.
Para mí, hay dos pasos clave en este nuevo escenario:
- Informarme constantemente: no quiero que estas transformaciones me pasen por encima.
- Adaptar mis contenidos para la IA: ya no basta con escribir para personas y buscadores; ahora también escribimos para algoritmos generativos.
La llegada del modo IA de Google ha cambiado radicalmente la forma en que los usuarios interactúan con el buscador. Con herramientas como el Search Generative Experience (SGE), Google ha dejado de limitarse a mostrar enlaces: ahora ofrece respuestas contextuales generadas por inteligencia artificial.
Esto lo cambia todo. Porque cuando el usuario ya no necesita hacer clic en un resultado para obtener la información que busca, el enfoque clásico del SEO —basado solo en posicionar palabras clave— pierde parte de su efectividad. Hoy, el reto está en lograr que nuestros contenidos aparezcan dentro de esas respuestas generadas por la IA.
Y aunque al principio puede parecer desalentador, yo lo veo como una oportunidad: si entendemos cómo funciona este nuevo entorno, podemos seguir siendo relevantes, visibles y, sobre todo, útiles para quienes nos buscan.
¿Cómo afecta el modo IA de Google a la estrategia SEO?
Desde que el modo IA de Google se integró en el buscador, he tenido que replantearme por completo cómo enfoco mis estrategias SEO. Lo que antes giraba en torno a escalar posiciones en la página de resultados, hoy depende más de lograr visibilidad dentro de las respuestas generadas por inteligencia artificial.
Ya no basta con estar en el top 3. Ahora, lo que realmente marca la diferencia es que Google cite o referencie nuestro contenido en sus resúmenes automáticos. Esta nueva funcionalidad ha cambiado las reglas del juego, y lo he notado especialmente en tres áreas:
- Disminución del CTR: al ofrecer respuestas completas, muchos usuarios ya no sienten la necesidad de hacer clic en los resultados tradicionales.
- Cambio en la experiencia de búsqueda: ahora todo ocurre dentro del propio buscador, lo que obliga a adaptar el contenido a este nuevo entorno.
- Nueva métrica clave: más allá del tráfico orgánico clásico, hoy mido el éxito por la aparición en las respuestas generadas por IA.
Este cambio también ha afectado directamente a la visibilidad de marca. Si no aparecemos en esos fragmentos destacados, simplemente dejamos de existir para una gran parte de los usuarios. Y como profesional del SEO, he comprendido que optimizar para el modo IA no es una opción, sino una necesidad.
Por eso, mi enfoque se ha desplazado: priorizo la utilidad y la claridad del contenido, pensando tanto en la experiencia de usuario como en cómo lo interpretará la IA de Google. La estrategia ya no se limita a posicionar por palabras clave, sino a aportar valor real que pueda ser seleccionado por los algoritmos generativos.
Adaptarse al SEO al modo IA es, en definitiva, entender cómo afecta al SEO este nuevo paradigma y tomar decisiones que garanticen que nuestra presencia online siga siendo fuerte, relevante y competitiva.
De contenido informativo a contenido experiencial y útil

Una de las lecciones más claras que he aprendido con la evolución del SEO es que ya no basta con informar. El típico contenido que repite lo que otros ya dijeron, sin aportar nada nuevo, simplemente ha dejado de funcionar.
Google ha dejado claro que ahora premia la experiencia auténtica y la autoridad temática, lo que conocemos como EEAT. Y para mí, eso significa poner en juego mi propia experiencia, mis casos reales y todo el conocimiento que he acumulado a lo largo del tiempo.
Por eso, cuando creo contenido hoy, me enfoco en tres pilares:
- Compartir experiencias propias: no hay nada más valioso que contar lo que realmente me ha funcionado (o no) en proyectos reales.
- Buscar ángulos distintos: si quiero destacar, necesito aportar valor desde un enfoque que la IA no pueda replicar tan fácilmente.
- Evitar lo genérico: huyo del contenido duplicado y superficial que, aunque todavía aparece en los primeros puestos, ya no engancha ni convierte.
En este nuevo entorno, la diferenciación lo es todo. He aprendido que mi contenido solo funciona si resuelve problemas reales, si ofrece soluciones prácticas y si conecta con la verdadera intención de búsqueda del usuario. Ya no escribo solo para posicionar, sino para ser útil de verdad.
Cómo estructurar el contenido para el modo IA
Los modelos de lenguaje como Gemini o ChatGPT procesan mejor el contenido estructurado y bien organizado. Por eso, conviene adoptar formatos pensados para LLMs, como:
- Capas tipo Q&A: estructura de preguntas y respuestas claras.
- Listas prácticas y secciones bien definidas.
- Datos estructurados y lenguaje natural.
Cuanto más accesible sea tu contenido para la IA, más probabilidades tendrá de ser incluido en sus respuestas.
Visibilidad, branding y posicionamiento en el buscador de Google
En este nuevo contexto, el reconocimiento de marca cobra más valor que nunca. Google tenderá a citar fuentes con autoridad y marcas reconocidas en sus respuestas IA. Por eso:
- Refuerza la presencia de autores y expertos visibles en tu sitio.
- Construye una estrategia de branding coherente y sólida.
- Genera contenido citado por otros sitios relevantes.
El modo IA en el SEO exige una visión integral donde la autoridad y el branding juegan un papel determinante.
Medición del impacto del modo IA en tu estrategia SEO
Medir si tu contenido está apareciendo en las respuestas de IA es un nuevo reto. Algunas acciones recomendadas son:
- Analizar los cambios en el CTR y la tasa de clics en Search Console.
- Monitorizar menciones y citas en herramientas de análisis de visibilidad.
- Observar cómo se comportan tus keywords en los resúmenes de IA.
Estas métricas te permitirán ajustar tu estrategia y mejorar tu posicionamiento dentro del modo IA de Google.
Innovación y creatividad: el valor diferencial frente a la IA
Desde que el modo IA en el buscador empezó a transformar la forma en que se muestran los resultados, he tenido que preguntarme qué puedo ofrecer yo que una IA no pueda replicar. Y la respuesta ha sido clara: creatividad, originalidad y valor humano. La IA generativa puede procesar datos y generar respuestas, pero no puede imitar una perspectiva única ni una voz auténtica.

Por eso, en mi estrategia de marketing actual, me esfuerzo por ir más allá de solo trabajar con palabras clave. Me centro en crear contenido que no solo posicione, sino que realmente conecte. ¿Cómo lo hago?
- Desarrollo herramientas y recursos prácticos que ayuden a resolver problemas reales de mis usuarios.
- Diseño contenidos interactivos y útiles que mantengan la atención y animen a quedarse en mi web.
- Busco nichos específicos y temáticas poco exploradas, en los que sé que puedo aportar un punto de vista distinto, no extraído de ninguna fuente que la IA haya procesado previamente.
He notado que cuando hago esto, no solo aumento mi visibilidad, sino que consigo un tráfico de mayor calidad, con usuarios realmente interesados. En un entorno donde muchos ya no necesitan hacer clic en ningún resultado porque la IA ofrezca respuestas directamente, ser capaz de atraer visitas reales es una ventaja enorme.
Para mí, el reto ya no es solo el posicionamiento en buscadores como lo entendíamos antes, sino destacar en un mar de resultados orgánicos y resultados de IA cada vez más parecidos entre sí. Mi diferencial es crear algo que la Google AI Mode no pueda sustituir: contenido con intención, experiencia y propósito.
